Sirve para albergar una porción muy grande algún alimento (por ejemplo, una torta, pastel, etc.) como para varios platos con porciones pequeñas. Su formato redondo le provee finura y lo ahce ideal para utilizar, por ejemplo, en almuerzos o meriendas.
Pese a que debes evitar que se aplaste o se golpee, el plato dispone de una estructura resistente. Por ello no se dañará con el peso ni por el uso constante.